Mi nombre compuesto Juan Gregorio

Mi Mamá + Mi Papá igual al Menda.

Bueno mi nombre  compuesto es Juan Gregorio, porque así lo quiso mi madre y sobre todo mi padre Juan Gregorio. Mi Abuelo se llamaba Gregorio, pero ya toda su ascendencia se llamaba Juan Gregorio, nombre típico en el pueblo de Rute (Córdoba), allí por parte de mi padre nos llaman los quemaos, porque en los pueblos es típico utilizar los motes, y como se quemó algún tatarabuelo, pues ya la familia se quedó con esa etiqueta. No me enrollo más, y voy a las diferentes variedades de como me llama la gente, y son las siguientes: 

Juan, para la gente que me llama por primera vez y quizás no se acuerde del segundo nombre, o crea que el Gregorio es apellido, o por vagancia diga Juan, que es más corto y sencillo de pronunciar. Hasta los niños pequeñitos con el biligüismo lo pronuncian muy bien al decir uno en inglés.

Gregorio, utilizado normalmente para la gente de mi trabajo, clubes, amigos nuevos, en el cole,... . Así cuando me presento y no quiero complicaciones, soy Gregorio, aunque a algún niño le cuesta pronunciar, es el nombre que más se ha consolidado por esta tierra de Valdemoro.

Juan Gregorio, utilizado para actos oficiales, universidad, en árbitros, parece que  cuando me nombra así, impongo más y me siento como más importante. Demasiado serío creo yo.

Juangre.- mi nombre más familiar, el que más cariño le tengo, el que todavía mis amigos del alma me pronuncian, y cuando lo oigo pues me gusta. Aunque a veces he intentado presentarme así con la gente y es un follón, me llaman Juanpe, Juande, Juanje, hasta Sangre, me dijeron una vez, por tanto no suelo presentarme con este nombre. 

Ligregorio. Mezcla de León- Tigre unido a mi nombre Gregorio. Así me llamaban mis compis de arbitraje en Córdoba, en plan cachondeo. !Qué grandes recuerdos!

Goyo, sólo algún graciosillo me ha llamado así, y mejor me ahorro el comentario por ser está página para todos los públicos.

También he tenido motes: cateto (por ser de Rute, aunque no nacido allí), Indurain (por su parecido físico ojalá fuera por ser un campeón), Cabestro (por mi hermano, típico entre hermanos) Escarabajo trepador(en alguna salida ciclista con mis amigetes de Valdemoro), Ciervo con los cuernos retorcidos (algunos arbitruchos me llamaban así, algunos de ellos ya retirados, y yo sigo ahí), Pulmón Juangre, (cuando echabamos partiditos la pandilla, pero no porque yo estuviese bien fisicamente, sino porque todo el mundo estaba hecho polvo y el único que corría era yo, no sabía hacer otra cosa)

Y la pregunta final ¿Cómo se llama mi hijo? Pues no se llama Juan Gregorio, porque después de todo este preámbulo y conflito de nombre, no quería que Victor pasará por lo mismo. Aunque alguno se empeñe en llamarlo Gregorín, será siempre Victor.