lunes, 10 de septiembre de 2012

8 DE JULIO DEL 2012. IRONMAN DE FRANKFURT. UN SUEÑO HECHO REALIDAD.






Días previos con la familia y algunos amigos ( Angelillo y Edu que fueron finisher, luego Pepe amigo de Edu, Pilar, su hermana, el Matu y su hija, totos estos últimos de Ciempozuelos! que buena gente hay allí! y nos acogieron muy bien. Pues estuvimos visitando la ciudad y preparando todo para el gran día.




Dos días antes nos fuimos a nadar a una piscina cubierta, con la curiosidad de tener vestuarios mixtos, y había que cambiarse en unos habitáculos para salir a esa zona mixta a dejar toda la ropa en unas taquilla, pues nada Angelillo que salió sin darse cuenta en bolas y vaya gritos pegaba una alemana ruborizada ya bastante madurita al verle el paquete “Somos españoles, no pasa nada”.





El día anterior fuimos a dejar la bici y todos los bártulos al lago, allí nos dimos un baño estando el agua estupenda. Teníamos que llevar tres grandes bolsas con el material: la blanca (todo lo de la natación: gorro, gafas, vaselina, tapones, mono y neopreno,… ), azul (todo lo de la bicis: comida, guantes, maillot y cullote, manguitos y chubasquero, casco, zapatillas…) y roja (todo lo de la carrera, zapatillas,medias compresivas, pantalón corto, camiseta de tirantes, comida, visera….), y es que luego en cada transición entrabas en una carpa a cambiarte entero, como curiosidad también eran mixtos, y había voluntarias de por medio, pero no se ruborizaban, estaban acostumbradas. Una vez dejamos todo preparado en nuestro sitio, y siempre acompañado de una voluntaria que iba contigo y te explicaba todo, tuve la suerte que al escuchar mi ingles hispanis me la dieron española que estaba de prácticas de Erasmus allí. Y es que antes de entrar te hacen una foto con tu bici, será para comprobar luego con las fotos que eres tú el que llegas a meta y no otro. Bueno pues vuelta, cena ligerita y a intentar dormir. Sí que lo hice porque soñaba con este momento y ya estaba cerca de ser realidad.


A las 3:55 h. suena el despertador, no me cuesta levantarme ya que estoy ilusionadísimo. Desayuno lo que puedo, pero como siempre, mis tostadas con mermelada y mi zumito de naranja. Preparo unos trozos de pan con miel para la bici y los bidones con isotónica e hidratos. Y listos para partir. A las 4:30 h. salimos del hotel, vamos al lugar de recogida de atletas, para transladarnos en autobús al lago, se ve mucho movimiento por las calles mezclados triatletas que van a hacer un Ironman, y zombis que vienen de vuelta de una noche de marcha. Me toca hacer el viaje de pie, y tardó un poco el autobús en llegar debido al tráfico y los controles que existían por cortes de carreteras. Por fín estamos en el lugar D en el día D, y falta nada para la hora D, allí todo el mundo haciendo los últimos preparativos, por supuesto una cola increíble para ir al baño.

Todo está listo, puesto el Neopreno, faltan 15 minutos y nos colocamos en la zona de playa para ver como salen los profesionales, luego nos tiramos nosotros al agua, ya nadie habla, esperando nuestro cañonazo de salida, y …. La gente empieza a nadar, vamos a allá, empezamos la aventura y estoy algo emocionado, somos casi 3000 personas nadando y evito cualquier guerra en el agua, no me importa perder posiciones, se me pasa la primera vuelta muy rápida ya que voy disfrutando, llevando una natación muy limpia al mismo tiempo que cuando levantas la cabeza para ver dónde está la boya ver tantos gorros nadando que me impresiona. Salimos del agua para dar la segunda vuelta y la gente te anima como nunca he visto, otra vez al agua y seguimos nadando con gente, pero ahora puedo coger pies perfectamente, incluso estaba tan bien señalizado el circuito que los últimos metros parecía que iba en una piscina. Llegada a la orilla impresionante la subidita hasta los boxes, lleno de gente gritando, y los triatletas muchos de ellos se flipaban y se echaban a correr como si fuera un triatlón sprint, pero yo no quería forzar mi tobillo nada hasta la maratón y la hice andando.

Cogí mi bolsa y cuando estoy cambiándome en la gran tienda de campaña montada veo que está cayendo la de Dios, ahí me acorde de mi amigo Angelillo, el pobre no quería que lloviera en la bici y mira por donde nada más empezar y cayendo un chaparrón de los buenos. A mí en el fondo como no me importaba el tiempo empleado en terminar el Ironman me daba igual, por lo que me abrigue bien y tome mis precauciones en la carretera, no quería caerme por intentar ir más rápido. Pues toda la primera vuelta lloviendo, incluso granizando en unos instantes, siempre que había llovido allí, en poco tiempo cambiaba el tiempo y salía el sol, pero ahora parecía que no!!! A pesar del mal tiempo había mucha gente animando, haciendo ruidos con todo tipo de instrumentos musicales: maracas, campanas, etc… había unas especies de maracas que cada vez que sonaban me creía que se me salía se me había averiado la cadena, vaya sustos me llevaba y siempre caía, debido a la concentración que llevaba, como además soy el pupas, y como casi siempre averío pues estaba acojonado, además había muchos triatletas que sí sufrieron averías, y me decía a mi mismo que por favor que no sea yo el siguiente. Os tengo que decir también que me acordaba también del Señor, dándole las gracias por lo bien que se había portado con mi hija y ahora conmigo, después de haberlo pasado fatal en los meses anteriores. Era increíble el ambiente cuando pasábamos por algún pueblo, con su escenario montado, anunciando tu nombre cuando pasabas, algunos inclusos te hacían la ola. Otros en medio de la carretera estaban aparcados con los altavoces puesto, musiquita y a animar. Un espectáculo.

El circuito era rápido, pero había tres repechillos que no veas, vaya nombrecitos le habían puesto: The Beast, The Hell and The Bad Village. Parecían como si estuvieras en el Tour de Francia, haciéndote el pasillo como a los ciclistas profesionales y animándote como si fueras el líder de una gran vuelta, incluso en uno de ellos tenían contratados a dos diablos que corrían al lado tuyo, pero creo que ya estaban algo cansado cuando llegué por allí y no tuve ese honor. Pues ya terminando la primera vuelta parece que para de llover y se ve al fondo el sol, aprovecho para hacer un stop, paro en un baño donde hay un voluntario que me ayuda custodiándome la bici, mientras yo me tiró misionando un buen rato, luego me quito ropa y me pongo ligerito para soportar calor. Así es el tiempo en Frankfurt, “cambiante total”. En la segunda vuelta paré en el mismo sitio, aprovechando que aquí estaba este voluntario que te custodiaba la bici. También pensaba mal y me decía mientras misionaba,

¡Anda que si salgo y se ha largado con la bici, la cara de tonto que se me iba a quedar! Pero qué va!!! Se puede confiar en estos alemanes!!! Por fín llego a la transición de bici a carrera, antes de parar oigo un grito, y es de mi familia, me hizo gran ilusión la pena fue que me pilló ya muy adelante y no podía ir a darle un beso.

Me bajé despacio y a cambiarse, ahora me doy cuenta que hay voluntarias, pero yo a lo mío me despeloto, me cambio y salgo para fuera, otro pisss, saludos a los míos y empiezo a correr….., no me lo creía, que hacía yo allí, con la lesión que tuve….la primera vuelta fue la que más disfruté porque iba bien y me veía pletórico, el tobillo respondía, ¿hasta cuándo? Pues me iba poniendo objetivos pequeños, venga hasta el próximo avituallamiento, venga a por otro, venga otra vuelta más, y vemos a la familia, y así iban pasando los kilómetros, ya mi ritmo bajo, era normal porque estaba corriendo más rápido que cualquier entreno mío antes de venir. Estamos hablando de que fui con apenas entrenos de arrastrarme en vez de correr y mucho fisio y recuperación. Me sorprendió la gente que iba andando porque no podían más, y yo aunque llevaba un ritmo de tortuga, casi andando, intentaba no andar, incluso una vez me puse a andar y no podía muscularmente. En la vuelta dos y tres tuve bajones, pero mi fuerza mental podía, y en la última vuelta ya veía que sí lo iba a conseguir, aunque cambió el tiempo y una fuerte tormenta cayó, pero nada ya me quedaba muy poco, en el último avituallamiento se voló todo y estaban los voluntarios reguardados, así que autoservicio cogí un poco de cocacola y a disfrutar del último kilómetro.


Estaba loco de emoción, escuchaba la música, las asereje, y allí que me puse a bailar el bailecito antes de girar a la derecha a meta, por un pasillo muy estrecho donde iba chocando las manos a todo el mundo durante 400 metros y llegada triunfal por el mismo pasillo con dos graderíos llenos de gente a ambos lados, visualice a mi familia, me fui para ellos para abrazarme, estaba en extasis, continue dando vueltas sobre sí mismo hasta llegar al arco de meta, donde levanté los brazos unos cuantas veces, entré y con gran ilusión me colgaron la medalla, ya dentro, después de hacerme la foto con mi medalla, me rompí a llorar de la emoción.

“UN SUEÑO HECHO REALIDAD”. 13 horas de ensueño que todavía hoy no me lo creo como lo pude terminar.


Al día siguiente fiesta de entrega de premios y slot para Hawai, también un acontecimiento muy bonito de asistir aunque yo no gané ningún trofeo pero si que gané y triunfé en el reto que me propuse hace ya más de 3 años.



lunes, 3 de septiembre de 2012

VIDEO DE LA LLEGADA TRIUFAL.


Proximamente la crónica.

DECALOGO DEL EXITO DEPORTE DIVERTIDO

VIDEO GUAPO DE TRIATLON

IRONMAN. AQUÍ PODÉIS OBSERVAR PORQUE DICEN QUE ES LA PRUEBA MAS DURA DEL MUNDO.

OJALA TUVIERA YO ESE FINAL.

VIDEO ESPELUZNANTE.

AUPA TRIVAL EN GIJON

AUPA TRIVAL EN GIJON
Paco, Turu, Angel, Moli, Jimmy y el Menda.